Bienestar integral y marca empleadora: la clave para fidelizar talento en la era de la NOM-035
El 75% de los trabajadores mexicanos padece fatiga por estrés, por lo que contar con soluciones de bienestar e incentivos, puede mejorar el clima laboral de una compañía y su atractivo en el mercado laboral.
Esto es clave cuando 1 de cada 3 empresas enfrenta una alta rotación de personal, lo que afecta negativamente la productividad y la estabilidad organizacional genera una reputación corporativa negativa.
Durante años, la cultura del trabajo se construyó sobre la idea de que mientras más horas se pasen en la oficina, mejor será el desempeño. Y no es casualidad que México encabece la lista de las naciones con más horas laborales, con un promedio de 2,226 al año. Sin embargo, esta intensidad no siempre se traduce en productividad, ni en bienestar.
El 75% de los trabajadores padece fatiga por estrés, de acuerdo con datos oficiales. Jornadas extensas, carga excesiva de trabajo y falta de equilibrio entre vida personal y laboral generan entornos donde el agotamiento se normaliza. Ante ello, la pregunta es inevitable: ¿cómo pueden las empresas romper este ciclo y construir un espacio donde las personas realmente quieran trabajar?
Aquí es donde la NOM-035 cobra relevancia, pues su objetivo es establecer los elementos para identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosocial, así como para promover un entorno organizacional favorable en los centros de trabajo, al tiempo que implementarla de manera estratégica es una oportunidad para impulsar marcas empleadoras sólidas, en un entorno de alta rotación.
Marca empleadora: cómo impulsarla con la NOM-035
“Además del salario y prestaciones, la marca empleadora se construye con una verdadera cultura de bienestar. Si bien la NOM-035 ofrece un marco para lograrlo, su impacto depende de la implementación de estrategias efectivas, como beneficios que reduzcan el estrés financiero, incentivos que refuercen el compromiso y soluciones que promuevan el bienestar físico y emocional de los colaboradores” comenta Milagros Nadal, General Manager de Benefits and Engagement de Edenred México.
Lo anterior es clave en un entorno en el que las empresas compiten por atraer y fidelizar al mejor talento: 1 de cada 3 enfrenta una alta rotación de personal, mientras que, por su lado, 8 de cada 10 colaboradores considera más importante su salud mental que su carrera profesional.
Diagnóstico organizacional: el primer paso para aplicar la NOM-035
Para transformar el entorno laboral, primero es necesario conocer su estado actual. Identificar los factores que afectan el bienestar de los colaboradores permite desarrollar estrategias que realmente atiendan sus necesidades. Aplicar evaluaciones internas ayuda a detectar áreas de oportunidad, desde cargas de trabajo desproporcionadas hasta falta de reconocimiento.
Además de cumplir con la normativa, realizar un diagnóstico organizacional envía un mensaje claro: la empresa se interesa por su gente. “Algunas organizaciones han optado por herramientas y plataformas especializadas en la gestión del bienestar laboral, las cuales facilitan la administración de incentivos, la promoción del equilibrio entre vida y trabajo y el fortalecimiento de la cultura organizacional” apunta Nadal.
Medición y seguimiento: cómo evaluar el impacto de la NOM-035
Las acciones más efectivas son aquellas que pueden medirse. Una vez implementadas las estrategias, es clave analizar sus resultados para hacer ajustes y optimizar su impacto. Revisar periódicamente el clima laboral permite conocer de primera mano la percepción de los empleados y adaptar las iniciativas según sus necesidades en evolución, incluidos los planes de crecimiento y capacitación.
Cuando una empresa da seguimiento a sus esfuerzos de bienestar, demuestra su compromiso con una mejora continua. Más que una obligación, la NOM-035 refuerza su identidad como un empleador atractivo y confiable. En conclusión, construir una marca empleadora sólida es el resultado de decisiones estratégicas que priorizan el bienestar, el desarrollo y la satisfacción de los colaboradores.